Comienzo.

Le encantaba esto, por miles de razones. La más importante era que sabia que podría empezar de nuevo, no tenia miedo, tan solo ansiaba ver llegar el final para poder analizarlo todo. Podía ser la persona mas fría y calculadora o la mas dulce y cariñosa, nunca podrías haberlo sabido. No te culpes, tan solo acababas de conocerla… Ella ha cambiado, ¿sabes?, dicen que no es igual, que ha sentado la cabeza y que no es la misma cabra loca que era antes. Supongo que el habrá tenido que ver en esto… Aunque no se puede cambiar del todo. Ella siempre tuvo sus vicios, sus debilidades… Esa maldita fijación por alcanzar lo inalcanzable. Ese inconformismo… Me pregunto que será de ella… Como llevara su dulce martirio… 

Solo por si acaso.

Solo por si acaso. Solo por si en una de estas descubrimos que no nos soportamos. Solo por si el día de mañana nos dejamos y no queremos vernos más. Solo por si conoces a alguien que sea mejor persona que yo y tienes un momento de lucidez al mirarme. Solo por si desaparece la magia y ya no saltan chispas cuando estamos juntos. Solo por si algún día me ves como realmente soy. Solo por si mañana no me atrevo a decírtelo, te quiero. 

Solo.

Todo va bien. El sexo… Oh el sexo, tan maravilloso y tan fantástico como siempre. Estoy con otros. Te imagino a ti, te veo a ti, te siento a ti. Eres al único que no tengo. Átame, muérdeme, azótame, abrázame, bésame, despréciame. Porque solo quiero tu atención. Tus miradas, tus caricias furtivas. Tu pelo, mis manos, tus ojos, mi piel. La besas. Me miras. Me sonríes. Te busco, me encuentras. Me deseas. Te excito. Somos aquello que podemos mirar pero nunca tocar. Pero no nos huimos, tan solo nos hacemos de rogar.  

Y tú

Recuerdo entrar y escuchar la puerta cerrarse. Después el cerrojo. Y tú, solo tú, siempre tú. Tan misterioso, tan inalcanzable, tan sexy. Y yo, solo yo, siempre yo. Tan joven, tan dulce, tan provocativa. Tu lengua deslizándose dentro de mi boca. Tus manos acariciando mi cuerpo. Mordisqueo tus labios. Te agarro con las ganas del que nunca tuvo. Un giro brusco y un golpe contra la puerta. Tu aliento en mi nuca, tus manos en mi cintura. Me excito y trato de borrar esa imagen de mi mente. Sigue ahí torturándome. Excitándome. Complaciéndome.  

Soy Lulú.

Vale Pablo. Seré tu colegiala inocente, tu buena acción del día. Seré aquello que mas desees, tu alegría y tu tormento. Alegría al vernos, tormento al no poder tenerme. Aquello que empezaste y ahora no te atreves a terminar. Soy tu Lulú, quiero ser tu Lulú.

Ansia puta.

Hoy todo continua igual. El mismo deseo, la misma ansiedad. No hay sentimiento de culpa, tan solo ganas de reincidir. Esta mal y lo se, y tu también. ¿Que podemos hacer? Si aunque controlemos nuestros cuerpos no podemos controlar nuestra mente. Tus ojos siempre me buscan y los míos siempre te encuentran. Pasa igual al revés. Hoy todo sigue igual, solo ansia puta.